En España, un país que ya enfrenta restricciones de agua y sequías, la ósmosis puede parecer una tecnología atractiva. Pero, ¿es realmente la solución que necesitamos? Analicemos los hechos.
Un dispositivo de ósmosis aumenta el consumo de agua en un 400%. En un país donde el agua ya es escasa, el uso generalizado de dispositivos de ósmosis provocaría enormes problemas. Imagina si cada residente en España utilizara uno; la presión sobre nuestros recursos hídricos sería insostenible.
Además, la ósmosis filtra el 98% de las toxinas del agua, lo cual suena impresionante al principio. Pero, ¿qué pasa con ese 2% restante? Eso permanece en el agua que bebes, y también lo consumen los niños. Por lo tanto, está lejos de ser una solución perfecta.
Otro inconveniente del agua de ósmosis es su sabor. La ósmosis elimina todos los electrolitos del agua, lo que no solo afecta el sabor, sino que también hace que el agua sea menos adecuada para el consumo diario. Los electrolitos son esenciales para un cuerpo saludable, y el agua sin estos minerales simplemente no es ideal.
Nuestra solución alternativa, el Generador de Agua Atmosférica (AWG), ofrece una alternativa mucho más sostenible y eficiente. Nuestras máquinas utilizan electricidad (aproximadamente 400W), pero en un país soleado como España, solo dos paneles solares pueden compensar este consumo. Además, nuestras máquinas no solo producen agua potable limpia, sino que también conservan los electrolitos esenciales necesarios para una buena salud.
La mayor diferencia con la ósmosis es que nuestras máquinas no desperdician un 400% de agua. Al contrario, extraen agua del aire y la transforman en agua potable. Esto no solo es más ecológico, sino también más sostenible a largo plazo.
En resumen, la ósmosis puede parecer una técnica interesante, pero no es la solución que España necesita. Con nuestra tecnología AWG, no solo podemos ahorrar agua, sino también contribuir a un futuro más limpio y sostenible.